Residencia versus residencia fiscal en Portugal: Una distinción fundamental

Poseer un Visado de Oro portugués le otorga el derecho legal a residir en Portugal, pero no le convierte automáticamente en residente fiscal.

Independientemente de la residencia legal, sus obligaciones fiscales dependen de su estatuto de residencia fiscal y de la naturaleza de sus ingresos.

En Portugal, generalmente se le considera residente fiscal si:

Pasa más de 183 días (consecutivos o no) en el país durante un período de 12 meses.
Tiene una "residencia habitual" en Portugal, es decir, una vivienda permanente que pretende mantener como domicilio principal y que está registrada como tal en Portugal.

Esta distinción es fundamental porque determina si su renta mundial está sujeta a la fiscalidad portuguesa y a los requisitos de declaración.

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Tratamiento fiscal de las inversiones del Golden Visa

Inversiones que cumplen los requisitos del programa portugués Golden Visa(ya sean actuales o anteriores a la legislación Golden Visa)

Residente fiscal en Portugal

No residentes fiscales en Portugal

Fondos de Instituciones de Inversión Colectiva (distribuciones: dividendos, intereses y ganancias de capital )

La mayoría de los fondos actuales elegibles para inversión bajo el marco legal actual de Golden Visa.

Tributan a un tipo fijo del 28% (excepción: las plusvalías mantenidas durante menos de 1 año tributan a tipos progresivos).

La declaración de impuestos es opcional excepto para las ganancias de capital; sin embargo, declarar sus ingresos por dividendos utilizando los tipos impositivos progresivos, aprovechando la desgravación del 50% sobre los mismos, puede proporcionar un tipo impositivo efectivo más bajo que el estándar del 28% .

Exento en Portugal - siempre que se cumplan los criterios (véase más abajo "Evitar la retención en origen sobre las distribuciones de fondos portugueses") y no sea residente fiscal en un país incluido en la lista negra. Asimismo, consulte con su abogado/contable local los impuestos aplicables en su país de residencia fiscal.

No es necesario declarar impuestos , siempre que el fondo esté domiciliado en Portugal.

Fondos de Riesgo (distribuciones: dividendos, intereses y ganancias de capital )

La mayoría de los fondos con visado dorado más antiguos se rigen por la legislación de derechos adquiridos.

Tributan a un tipo fijo del 10%.

La declaración de impuestos es opcional, excepto en el caso de las plusvalías; sin embargo, declarar los ingresos por dividendos aplicando los tipos impositivos progresivos, con la desgravación del 50% sobre los mismos, puede proporcionar un tipo impositivo efectivo inferior al estándar del 28%.

Bienes inmuebles(para los que invirtieron cuando esta vía era válida y ahora están protegidos)

Se aplican varios impuestos independientemente de la residencia fiscal y dependen de la fase de la transacción (compra o venta), la naturaleza del uso de la propiedad (alquiler, vivienda principal, otros) y el valor de la propiedad (que afectará a más de un tipo de impuesto sobre bienes inmuebles). Más informaciónaquí- incluidos los requisitos de declaración de impuestos.

Otras notas

Tributa exclusivamente por las rentas de origen portugués. Los convenios de doble imposición con su país de origen pueden proporcionar desgravaciones.

Tributan por rentas obtenidas en todo el mundo - los convenios de doble imposición, si existen, pueden limitar la doble imposición. Si cumple los requisitos, puede aplicarse el régimen fiscal favorable de NHR.

Evitar la retención en origen sobre las distribuciones de fondos portugueses

Para los beneficiarios de distribuciones de fondos de inversión o de riesgo portugueses, los bancos suelen retener el impuesto en origen. Para evitar esta retención, los inversores no residentes fiscales deben proporcionar a su banco un certificado válido de residencia fiscal de su país de residencia fiscal.

La presentación de este certificado anualmente, antes de que el fondo realice cualquier distribución, garantiza que los importes se pagan en bruto. Este proceso no es aplicable, sin embargo, a quienes tengan su residencia fiscal en Portugal o residan en una jurisdicción incluida en lalista negra de Portugalya que estos inversores están sujetos a una retención en origen, con un recargo adicional del 35%.

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Es importante tener en cuenta que, incluso con la retención en origen, no se requiere ninguna otra declaración de impuestos ante las autoridades fiscales portuguesas para la distribución en sí (ya sea residente fiscal en Portugal o no - con excepción de los fondos de inversión domiciliados en Portugal). Sin embargo, para los inversores con residencia fiscal fuera de Portugal, es necesario comprender y cumplir con sus obligaciones fiscales en su país de residencia fiscal (póngase en contacto con su contable/abogado local para obtener orientación).