Elaboradas con cuerdas tensadas o lengüetas metálicas, las arpas crean suaves melodías al tiempo que albergan turbinas eólicas que alimentan las luces, los caminos y las estaciones de carga públicas cercanas.

Estas estructuras iluminadas son silenciosas y autosuficientes, lo que refuerza el compromiso del país con las energías renovables y la armonía medioambiental.